La reparación de calles y semáforos son los dos proyectos contemplados dentro del plan municipal de 120 días del alcalde Armando Calidonio, que los sampedranos más anhelan, por ser problemas que los afectan desde hace más de un año.
El plan de gestión municipal anunciado por el alcalde se sostiene en cinco ejes principales: calidad de vida, competitividad, infraestructura, medio ambiente y gestión municipal. El eje número tres sobre infraestructura y ordenamiento vial es uno de los puntos más relevantes, porque conlleva proyectos que agilizarán el tráfico y mejorarán la calidad de vida de los sampedranos. Entre los 28 puntos que conforman el tercer eje de infraestructura está reparar las calles para reducir a cero baches la estructura de la red vial. Para los dirigentes patronales, los trabajos de bacheo y terracería en las vías de la ciudad son labores que no deben prolongarse por más tiempo.
“Deben darle prioridad al bacheo de las calles, porque tenemos más de un año de sufrir por los grandes hoyos”, reclamó Dilcia Interiano, habitante del sector Satélite. Esta ama de casa advirtió a las autoridades sobre los trabajos en los que se utiliza material de dudosa calidad para tapar hoyos, lo cual no garantiza que las calles perduren en buen estado.
Rafael Vásquez, presidente del patronato de la aldea Armenta, coincide con Interiano en el deseo de ver transformadas las calles de la capital industrial en vías seguras. “Son hoyos los que hay en esta colonia, ya los buses no quieren ni entrar”, denunció.
En San Pedro Sula hay más de 200 barrios y colonias que tienen sus calles en mal estado. Esta situación ha provocado que jóvenes sin empleo tomen la iniciativa de tapar con tierra los agujeros a cambio de una ayuda económica por parte de los conductores.
Ciudadanos como José Armijo, presidente del patronato Las Brisas Uno, considera a los “tapabaches” como “hombres de buena voluntad”, porque tratan de solucionar un problema que compete únicamente a la alcaldía.
“San Pedro Sula está llena de baches. Yo creo que es justo que se invierta, no en bacheo, sino en una renovación de las calles con concreto y no con asfalto”, señaló Armijo.
Otro de los puntos en el tema de la infraestructura y el ordenamiento vial es realizar un estudio de modernización de los 85 semáforos de la ciudad, ya que 60 de ellos ya cumplieron el tiempo de su uso, además, ya se han dañado 22 de estos controladores viales. “Desde el año pasado están malos los semáforos, hay accidentes a montones y no se aguanta el tráfico vehicular”, manifestó Adonay Tróchez, un conductor afectado.
La ansiedad y frustración se apodera de los miles de conductores que sufren las consecuencias de los aparatos dañados, sobre todo en los tres bulevares de San Pedro Sula, donde en horas pico se agudiza el tráfico vehicular. “Los semáforos malos causan muchos atrasos y gasto de combustible”, lamentó José Alvarado, presidente del patronato de la colonia Juan Ramón Molina.
La reparación y rehabilitación del puente Las Brisas, también forma parte del tercer eje municipal, un proyecto que ayudará a disminuir los embotellamientos en esta zona. “Nosotros esperamos que en poco tiempo esté habilitado el puente, porque no aguantamos estos trancones”, señaló el ciudadano Enrique Ortega.
Las más de doce mil familias que residen en los 16 bordos de San Pedro Sula fueron contempladas por las autoridades edilicias en un megaproyecto de vivienda social -en estudio- mediante el cual se pretende reubicarlas en lugares más seguros y dignos.
“Jamás habíamos sido contemplados en un plan tan inmediato de la Municipalidad. Sabemos que hay muchas prioridades, pero no pedimos la reubicación de todos de una sola vez, pero sí que nos den respuestas”, declaró Soraida González, presidenta de la Coordinadora General de los Bordos de San Pedro Sula.
Un buen número de sampedranos piden la creación de auxiliares viales para apoyar a los agentes de tránsito en las calles, como también la pavimentación de calles en colonias marginales y la señalización del paso a desnivel de río Blanco.
